- El gerente de Esalfe es presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Andalucía desde el pasado mes de mayo.
Félix Almagro (Córdoba, 12 de abril de 1985) comenzó su trayectoria profesional en 2003. Actualmente combina su faceta de empresario como gerente de la compañía de alquiler de vehículos Esalfe con la presidencia de la Asociación de Jóvenes Empresarios AJE Andalucía, cargo que ostenta desde el pasado mes de mayo, tras haber sido secretario general del colectivo y presidente de AJE Córdoba.
¿Cómo afronta su etapa al frente de AJE Andalucía? ¿Cuáles son sus principales metas y desafíos?
Tras las siglas de AJE estamos más de 2.300 asociados al frente de más de 3.200 empresas en toda Andalucía. Somos casi el 40% de los jóvenes empresarios en España y, por tanto, la responsabilidad es enorme.
Además de rejuvenecer la asociación, una de mis prioridades será continuar el trabajo de mi predecesor, Melesio Peña, quien puso mucha dedicación en fortalecer nuestra unidad. Además, queremos empezar a poner el foco y dar visibilidad a los temas más relevantes para nuestros asociados, como son -entre muchos otros- la conciliación del empresario o el relevo generacional en la pyme.
¿Cómo valora la actual situación económica de Andalucía en comparación con otras regiones de España?
Más allá de la agricultura y turismo, Andalucía empieza a consolidarse en nuevos sectores estratégicos. No obstante, seguimos enfrentando importantes desafíos como la brecha existente entre el talento joven y las oportunidades laborales.
Desde la perspectiva del emprendimiento, el potencial de nuestra región es inmenso. Sin embargo, para aprovecharlo plenamente y de manera sostenida en el tiempo, necesitamos promover la inquietud por emprender entre las nuevas generaciones, además de propiciarles el mejor entorno para ello. En este sentido, desde AJE Andalucía hemos unido esfuerzos con la Consejería de Universidad para desarrollar un paquete de hasta 60 acciones que impulsen la vocación emprendedora en un espacio crucial como es el universitario.
Tecnología y renovables, sectores clave
¿Qué sectores económicos ve como más prometedores para el crecimiento a corto y medio plazo?
Andalucía se está consolidando como referencia en transición digital y energética. El sector tecnológico y el de las renovables han emergido como motores clave en Andalucía. No solo empieza a despuntar nuestra presencia en ambos, también estamos atrayendo a gigantes globales que ven nuestra región como un espacio perfecto para el desarrollo de sus proyectos.
La ubicación geoestratégica de Andalucía nos da una ventaja competitiva única para seguir impulsando estos sectores emergentes y atraer, así, más inversión extranjera y oportunidades de negocio.
Andalucía ha experimentado un crecimiento en sectores como el tecnológico y el agroalimentario. ¿Qué otras áreas tienen potencial para convertirse en motores económicos de la región?
Además de los mencionados, el turismo sostenible y la logística son también sectores de gran proyección que creo que situarán a Andalucía en el mapa económico y empresarial. Otro sector con un alto potencial es el de la biotecnología: somos una de las comunidades con mayor creación de empleo y empresas en esta área.
El desempleo juvenil sigue siendo un problema en Andalucía. ¿Qué medidas cree que deberían implementarse para reducir esta tasa y fomentar el emprendimiento entre los jóvenes?
Es esencial reforzar la formación de los jóvenes, alineándola con las demandas del mercado y fomentando competencias clave para el emprendimiento desde etapas tempranas, como en el colegio. En la universidad empiezan a formarse las primeras ideas de negocio, pero a menudo tardamos en lanzarlas al no disponer aún de las herramientas necesarias o no saber cómo enfocarnos. Para transformar ideas en proyectos viables, es crucial facilitar el acceso a recursos y mentorías. Y, para que lleguen a ser una realidad, la incentivación fiscal y la simplificación de trámites son áreas en las que trabajar.
Además, empresas y jóvenes hemos perdido los contratos de formación, un modelo que ayudaba muchísimo a bajar esta tasa y que ha dado innumerables oportunidades a los más jóvenes para demostrar su valía.
¿Cuáles son los principales retos que enfrentan hoy en día los jóvenes empresarios andaluces para iniciar y consolidar sus negocios?
Los retos más comunes son el acceso a la financiación, la burocracia excesiva y la falta de formación en habilidades empresariales. Además, muchos jóvenes emprendedores encuentran dificultades para construir y mantener una red de contactos sólida que les permita acceder a oportunidades de negocio. En este sentido, desde AJE Andalucía desarrollamos iniciativas como los programas Abastece o Conectando Empresas, cuyo propósito es eliminar esta barrera a lo largo de toda la región.
Asimismo, también es clave trabajar en el fortalecimiento de la confianza y la resiliencia, especialmente en un entorno económico y político incierto que no siempre invita a empezar a invertir o a continuar invirtiendo. Esto impacta inevitablemente en el crecimiento de los negocios, en la creación de empleo y también en algo que a los jóvenes empresarios nos preocupa mucho: el relevo generacional.
La digitalización y la innovación son claves en el mundo empresarial actual. ¿Cómo cree que los jóvenes empresarios andaluces están adoptando estas tendencias?
Los jóvenes empresarios andaluces hemos demostrado proactividad en el ámbito digital, especialmente en sectores como el comercio electrónico y las startups tecnológicas.
Sin embargo, aún existe margen de mejora en el control de los proyectos en sí: muchos pueden llegar a crecer más rápido de lo que son capaces de abordar. No obstante, desde AJE siempre encontrarán apoyo y acompañamiento para afrontar estos retos.
¿Qué papel está jugando AJE Andalucía en este proceso?
AJE Andalucía está siendo punto de referencia para el fomento de la digitalización y la innovación entre los jóvenes empresarios. Durante la pandemia, lanzamos la plataforma AJEnopara, que nos permitió mantener informados a nuestros asociados y duplicar su número, al vernos como una herramienta útil. Esto mismo ha ocurrido con DEMYO, herramienta que hemos creado para facilitar la contratación pública y privada y ayudar, así, a hacer crecer el negocio de nuestras empresas.
Además de estos y otros recursos -como programas de formación, eventos de networking y alianzas estratégicas-, también trabajamos en crear entornos colaborativos. Ejemplo de ello son las jornadas que organizamos junto con el Clúster OnTech en todas las provincias, donde se comparten experiencias y se facilita la activación de proyectos innovadores.
El acceso a la financiación sigue siendo una de las mayores barreras para los jóvenes emprendedores. ¿Qué soluciones o alternativas propone para facilitar este acceso en Andalucía?
Una de las soluciones más efectivas es fomentar la creación de fondos específicos de apoyo a jóvenes emprendedores, tanto desde el sector público como privado. Las líneas de crédito blandas, el micromecenazgo y los programas de capital riesgo dirigidos a startups son también opciones a potenciar.
Por nuestra parte, desde AJE Andalucía somos muy activos en la creación de alianzas con entidades financieras que permitan el acceso a financiación de nuestros asociados y contamos, además, con una oficina de financiación nacional.
Negocios con visión global
La internacionalización de las empresas es una oportunidad para el crecimiento. ¿Cómo definiría la presencia de las empresas andaluzas jóvenes en el mapa internacional?
Aunque estamos viendo un crecimiento en la presencia internacional de algunas empresas jóvenes andaluzas, todavía tenemos un largo camino por recorrer. Desde la asociación, y normalmente en colaboración con entidades públicas, procuramos cubrir la falta de experiencia en mercados exteriores con formación y herramientas prácticas. Hoy en día, la mayoría de los emprendedores conciben sus negocios con una visión global, pero a veces necesitan apoyo para acceder a esos mercados internacionales. Ahí es donde intervenimos para darles acompañamiento.
¿Qué recomendaciones daría a los jóvenes empresarios que quieren expandir su negocio fuera de España?
Además de diseñar una estrategia clara y bien estructurada, diría que investigar a fondo el mercado objetivo para adaptar el producto o servicio a la perspectiva local, así como rodearse de un equipo con experiencia internacional. También aprovechar las redes de apoyo, tanto institucionales como privadas, para facilitar la entrada a nuevos mercados.
AJE es un buen recurso en este sentido, ya que existen asociaciones de jóvenes empresarios en países clave dispuestas a colaborar y nuestro alcance puede ser global. Por ejemplo, CEAJE participó activamente en la Cumbre de la Alianza de Jóvenes Empresarios celebrada en la India el pasado julio.
¿Cómo evalúa la colaboración entre los jóvenes empresarios andaluces y las instituciones públicas?
Lo que realmente diferencia a AJE Andalucía y a las AJEs provinciales respecto a otras asociaciones es la estrecha relación que mantenemos con las instituciones. Cualquier presidente de una AJE provincial tiene un vínculo directo y fluido con su alcalde o presidente de la Diputación. Esto facilita en gran medida la gestión de necesidades de nuestros empresarios, fortalece su confianza y genera, a su vez, iniciativas de mucho impacto.
No obstante, a nivel nacional, los empresarios en general reclamamos estabilidad y recuperar nuestro papel frente al Gobierno central. Algunos de los más recientes cambios legislativos o propuestas en materia de trabajo se han promovido sin nuestra consulta, a pesar de lo que nos cuesta afrontarlos. Ahora asistimos a la negociación por la reducción de la jornada laboral y, para hacer avanzar el proceso, se ha necesitado incluir un plan para las pymes que no estaba previsto inicialmente.
¿Considera que existen suficientes incentivos y apoyos para el emprendimiento juvenil?
Existen herramientas e incentivos para fomentar el emprendimiento, pero no están llegando de manera efectiva a los jóvenes. La información es insuficiente, y las ayudas suelen estar muy focalizadas según sectores, como el industrial, lo que excluye a muchos jóvenes con ideas innovadoras. Además, gran parte del apoyo se concentra en las fases iniciales de los proyectos y no en su consolidación, que es precisamente donde se registra la mayor tasa de fracaso empresarial.
A esto se suma la necesidad urgente de reducir la burocracia. Simplificar los trámites sería uno de los apoyos más significativos que se pueden brindar hoy en día al emprendimiento juvenil.
La conciliación entre la vida laboral y personal es un desafío creciente para los empresarios. ¿Cómo cree que los jóvenes emprendedores pueden encontrar un equilibrio saludable?
Este es uno de los temas clave de nuestra agenda, siempre presente en nuestros comités y reuniones como preocupación generalizada. Si para un empleado conciliar puede ser difícil, en nuestro caso es extremadamente complicado. Sí, somos empresarios, pero también somos una generación que quiere conciliar. Necesitamos medidas. Necesitamos poder mantener negocios -de los que viven otras muchas familias- sin dejar de lado nuestros propios proyectos de vida.
Le pongo un ejemplo: como dueños de una empresa, los sueldos de los empleados dependen de nosotros. ¿Cómo se espera que suplamos nuestra ausencia cuando lo necesitemos? Con un gerente para cuatro o seis meses, por ejemplo, es prácticamente inviable. Contextos como este, muy comunes, nos llevan muchas veces a plantearnos seriamente la posibilidad de tener hijos o, incluso peor, a no poder disfrutar de una baja cuando los tenemos.
Desde su experiencia, ¿qué estrategias o prácticas recomienda para gestionar el estrés y evitar el “burnout” en el entorno empresarial?
Difícil pregunta para un empresario, ya que no conozco ninguno que no lo padezca. Establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal, fomentar el autocuidado y buscar apoyo en otros emprendedores o mentores son prácticas fundamentales. También es esencial hacer pausas regulares, obligarse a desconectar -desde AJE organizamos muchos eventos que ayudan a ello- y no tener miedo de pedir ayuda cuando las cosas se complican.
En su opinión, ¿están las políticas actuales de conciliación laboral adaptadas a las necesidades de los jóvenes empresarios? ¿Qué cambios considera necesarios?
Claramente, no. Las políticas de conciliación han mejorado, pero continúan orientándose únicamente al empleado sin mirar hacia el empresario. Necesitamos una visión más completa, que nos contemple a todos los actores con nuestras necesidades, expectativas y circunstancias.
El teletrabajo se ha extendido en muchos sectores. ¿Cómo cree que afecta esto a la conciliación y a la productividad de los jóvenes empresarios?
El teletrabajo nos ha regalado muchos nuevos jóvenes emprendedores. También ha permitido mover proyectos muy interesantes que quizás no habrían surgido si no fuese por un modelo operativo o colaborativo en remoto. Pero el empresario por lo general necesita estar en la calle, visitar a sus clientes, hacer nuevos contactos, conectar con sus empleados. El teletrabajo le facilita mucho, pero su productividad nace de esa dinámica.
Para terminar, ¿Qué recomendaría a los jóvenes andaluces que están considerando emprender su propio negocio en el actual contexto económico?
Mi mensaje es de optimismo. Siempre digo que emprender debe ser la primera opción, no una alternativa o salida secundaria. A pesar de los desafíos del contexto actual, hay grandes oportunidades para quienes estén dispuestos a crear e innovar.
Emprender es un camino lleno de aprendizajes, y aunque no siempre es fácil, el esfuerzo merece la pena. AJE Andalucía y sus AJE provinciales les acompañarán y apoyarán en cada paso del camino.